RICARDO CHAVARRÍA ESTÀ CONVENCIDO DE GANAR LAS ELECCIONES REGIONALES EN PRIMERA VUELTA.

“Nos atacan con guerra sucia porque saben que estamos en primer lugar”, expresa el líder del arbolito

Ricardo Chavarría, Carmen Ramos Oyolo y Marcos Guerra,
reafirman su lealtad a Fuerza Regional  para estas elecciones

El Ing. Ricardo Chavarría Oria, líder del movimiento regional “Fuerza Regional”, mostró su optimismo  de ganar en primera vuelta las elecciones a la presidencia del Gobierno Regional de Lima durante las contiendas electorales del próximo año.

 “Los que están con nosotros tienen la esperanza de alcanzar nuestro objetivo. Pero, esa esperanza también significa acción, voluntad y trabajo que es fundamental para ganar en primera vuelta”, precisó Chavarría Oria.

Invocó a la población que debe diferenciar lo que es la política de la mentira, impuesto por los gobernantes de la región, al no honrar sus compromisos  en la campaña electoral.

“La política debe ser sinónimo de servir, brindar  la oportunidad a todos en la educación, salud, alimentación y trabajo, de lo contrario continuaremos en la incertidumbre, el caos y la aparición del terrorismo”, precisó.”

NOS QUIEREN TUMBAR CON GUERRA SUCIA

Por otro lado, dijo que en vista que Fuerza Regional, es la primera opción para ganar las elecciones del próximo año, sus adversarios han emprendido una contra campaña a su persona utilizando la “guerra  sucia”.

“Nos han dicho de todo: que estoy enfermo, me alejaré de la política, me voy de viaje al extranjero y no sé qué más, lo cual es totalmente falso y ratificamos nuestro compromiso de ganar en primera vuelta”, comentó Chavarría.

El líder de Fuerza Regional, quien dio estas declaraciones durante las elecciones de la nueva junta directiva de Fuerza Regional en Cañete, felicitó al Ing. Enrique Guerra Manrique por asumir el nuevo reto.

“Ustedes llegaron a esta ceremonia en forma voluntaria, porque saben que hay una esperanza de cambio en la política y apuestan por una verdadera transformación  en la región”, precisó Chavarría.

“Menos mal que ya se fueron los que tenían que irse. A veces pienso que eran un obstáculo en nuestra organización porque impedía su avance. Ahora es tiempo de cambio porque soplan vientos nuevos y el árbol se ve robusto,  frondoso e imbatible”, concluyó Chavarría en medio de las vivas de la gente que se dieron cita al restaurante Brizet.